Mes de grandes alegrías para la gran mayoría de niños y para un alto número de adultos que disfrutan de estos días de preparación para la Navidad.
Hasta hace un tiempo adoraba este día: montar el árbol, el Belén, escribir la carta a los Reyes Magos/Papa Noel... y todas las típicas tradiciones pre-navideñas, pero un día algo ocurrió. Se rompió la magia de la Navidad. Desde ese momento, pensé que nunca más volvería a disfrutar de la Navidad, hasta hoy.
Esta mañana, cuando volvía a casa un niño me ha hecho recobrar la ilusión y darme cuenta de que aunque las personas a las que más queremos no estén aquí en estos días, nosotros tenemos que seguir adelante y celebrar todo aquello que a ellos les habría gustado.
Buenas noches a todos/as.
Exactamente pensé esto cuando mi abuela con quien viví 19 años de mi vida falleció... Pero hay que seguir sonriendo por los que no están. Ellos lo querrían así.
ResponderEliminarUn beso
La echo de menos:
http://futuradoctoranova.blogspot.com/2011/06/la-echo-de-menos.html